martes, 12 de mayo de 2015

¡Mami, solo mami!


Nuestro peque hace poco cumplió 19 mesecitos. 19 mesecitos al lado de mamá y de papá. Pero desde hace un par de meses, está madrero madrero. Y la cosa parece que va a más.

No me preocupa (demasiado). Creo que es una fase, ya pasará y saldrá de él ser más independiente. Además en el fondo fondo (y no tan fondo), me gusta ser la única persona con la que quiere estar en el mundo en algunos momentos. A veces es agotador, no os voy a mentir. No me deja ni ir a hacer pis tranquila. Si estoy cocinando va y viene del salón y me da abrazos y besos en la pierna o me pide que lo coja en brazos, o se me queda agarrado a la pierna cual perezoso a una rama. Si desaparezco de su lado sin su consentimiento, empieza el berrinche. Y peor es si me tengo que ir a la ducha y lo dejo con el papi, o si se ha despertado con sueño de la siesta o con una pesadilla y acude el padre, y no su mami... Es como si lo estuvieran matando. En cuanto aparezco en escena, me echa los brazos al cuello, y se agarra como si fuera un koalita, rodeando mi cuello con sus brazos, como si le fuera la vida en ello.

Son momentos que en el fondo disfruto. Los disfruto porque sé que pronto no será así. Antes de que me dé cuenta, querrá jugar solo o con amiguitos, o él querrá hacer las cosas solo, por sentirse un niño grande... Intento grabar en mi memoria su olor, sus lágrimas mojándome el cuello o el hombro, sus besos, sus tirones de pelo, su sonrisa... 

Pero junto con esta mamitis, ha aparecido también una especie de anti-papitis. Quiero decir que a veces no quiere ver a su padre ni en pintura, ¡es como si lo rechazara! Y mi pobre marido, aunque no dice nada, se le ve afectado y un poco dolido o triste. Él que va a cogerlo en brazos y consolarlo con todo su cariño e ilusión, y el peque se pone peor y me llama a mí. Por más que me guste que mi hijo quiera estar conmigo, también siento la pena y dolor que deberá estar sintiendo mi marido.

Además esta mamitis también ha venido acompañada de una gran timidez ante los extraños ¡que nunca antes había tenido! Antes era un niño muy sociable y simpático, se acercaba corriendo a todos los niños, y les "hablaba" (en su idioma minion), les decía "hola"... Con los adultos era igual. Y desde hace un par de meses, a la vez que se ha ido incrementando esa mamitis, no quiere saber nada de las personas extrañas... No quiere saludar a los vecinos, se esconde detrás de mis piernas, o se tapa la cara... y en los casos en los que se siente más intimidado, rompe a llorar, tiembla y me busca para agarrarse a mi cuello, mientras sigue con su berrinche. 

Pensé que con lo que le gusta el agua, las piscinas y el mar, apuntarlo a clases de natación le ayudaría para socializar mientras se lo pasaba pipa, y aprender una nueva habilidad y así poder defenderse en el agua. Pues nada. Fue acercarse la monitora a él, y le entró el pánico, se puso histérico a llorar, y así estuvo agarrado a mi cuello toda la clase, sin querer que la monitora se acercara ni a 1 metro. Estuvo a punto de vomitar de tanto llanto. Juguete que la monitora le ofrecía, juguete que de un manotazo lleno de rabia lanzaba a la otra punta de la piscina... Qué papelón. Mañana tendremos la segunda clase y me veo venir otro berrinche monumental. Ains...



¿Vuestros peques también están pasando/han pasado por algo así? ¿Son tímidos? ¿Tienen mamitis o papitis?


2 comentarios:

  1. Ufff... Estoy segura de que es una fase, pero vaya fase! Y pobre tu marido! Supongo que será ese momento que dicen que las niñas no quieren ver a mamá ni en pintura y los niños no quieren ver a papá, porque les ven como un rival por el amor de la madre. No te puedo aconsejar porque aún no hemos llegado, pero lo que he leído en muchos sitios es que no se debe consentir que el niño "gane", que los padres se dejen separar. Si te digo la verdad no tengo ni idea de cómo hacerlo, pero lo que te dicen es que hay que hacerle ver que mamá y papá son un equipo y se quieren mucho, y él forma parte de eso, pero no es el líder ni está al nivel de los padres.
    Qué rabia lo de la piscina, porque se lo pasan fenomenal! Aunque según te iba leyendo me dabas un poco de envidia por el koalita pesado que solo quiere estar contigo! Ay cuándo me pasará eso a mí!!
    Mucho ánimo, es una de las muchas fases coñazo por las que pasan los herederos!!

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    1. Gracias por tu comentario guapa!! En nuestro caso no quiere que nos separemos ni nada de eso, de hecho, él nos pide que nos demos besos entre nosotros, y no consiente que no estemos los dos con él a la vez jejejeje y cuando rechaza al papi, y sólo quiere brazos con mami, mi marido sigue con nosotros, nos se va cabizbajo a otro lugar a lamer sus heridas jajaja De hecho, se queda abrazándolo también y dándole mimitos pero eso sí, desde los brazos de mami...

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