jueves, 30 de abril de 2015

Los cambios tras el embarazo que nadie te cuenta...


Sí, sí, todos sabemos que durante el embarazo se producen muchísimos cambios en el cuerpo de la mujer y se da por sabido que tras el parto el cuerpo no es el mismo y tarda un tiempo en recuperarse y volver a ser lo que era, si es que realmente se llega a estar exactamente igual que antes (que en algunos casos, es imposible...).

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Pero hay cosas que al menos a mí nadie me advirtió de que pasarían, y me hubiera gustado haber estado mentalizada y prevenida; así que aquí las cuento para que no le pillen a ninguna por sorpresa...


1) Aunque consigas perder esa barriguita en tiempo récord (yo la perdí completamente en dos semanas, hay quien tarda más y quien tarda menos), estará blanduchi, como yo la llamo... y a no ser que tras la cuarentena te pongas a hacer ejercicios dirigidos a esa zona, seguirá así durante un tiempo, hasta que te pongas en forma cuando el churumbel empiece a correr de aquí para allá...

2) El pecho aumenta muchísimo el tamaño tras la subida de la leche, se mantendrá así un tiempo, pero posteriormente es posible que vuelva prácticamente a su tamaño original, y estarás meses que no sabes qué talla usar, y te volverás loca buscando un sostén que ni sea demasiado grande ni demasiado pequeño, entre tu colección de sujetadores... (y siendo sincera, tus pechos difícilmente serán los de antes, tras la lactancia materna, sobre todo si ésta es prolongada... pero oye, ¡que tampoco hay nada malo en ello!)

3) Dicen que la recuperación de un parto vaginal es más rápida que una cesárea, y en la mayoría de los casos es así. En mi caso, por desgracia, no fue así; tardé 8 meses en que los puntos del gran desgarro que tuve cicatrizaran, después de que me cosieran fatal...

4) Aunque tras el embarazo, el estreñimiento debería haberse ido... el miedo a hacer de vientre tras haber parido, sobre todo si tienes puntos, puede hacer que te provoque estreñimiento, lo cual empeorará el problema. Aún recuerdo el miedo con el que fui al baño a los dos días de haber dado a luz, llena de puntos, pensando que se volvería a abrir el desgarro, me moriría del dolor, o se soltarían los puntos... Puff, qué mal rato. Y la cosa empeora, si te dan un suplemento de hierro y te han salido hemorroides...

5) Big Foot: ¡los pies crecen! Sí, sí, ya a finales del embarazo me empecé a dar cuenta de que necesitaba 1 ó 2 tallas más en mi calzado, pero pensé que tras el parto, mis pies volverían a su tamaño de antes, culpando del aumento de talla a la retención de líquidos e hinchazón. Pero no. Me quedé con una talla más grande de pie que antes de estar embarazada.

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6) Pelos de cavernícola. A ver, a ver... Me explico: durante el embarazo, las hormonas hacen que luzcas una melena deslumbrante, pero igual que pasa en todos los cuentos Disney a las 12 de la noche, aquí una vez que acaba el embarazo, ¡se acaba la magia! Tras el parto, a los 2-3 meses empiezas a perder todo el pelo que durante el embarazo no perdiste. Y creerás que te vas a quedar calva, al ritmo al que se va cayendo... Pero ahí no está el problema. El problema viene cuando todo ese pelo que has perdido, ¡vuelve a crecer y empieza a repoblar la cabeza! Te encontrarás con miles de pelitos cortos, sobre todo en la frente (un flequillo raro, raro), encrespados que no llegas a recogerlos con una gomilla ni con pinza y que se quedan todos locos, al viento, dejándote una pinta horrible de loca o de cavernícola que no se ha peinado en la vida.

7) Durante la lactancia (también en el embarazo... pero a mí en el embarazo no me pasó), el vello corporal puede tardar más en crecer o puedes estar un tiempo sin tener ese vello. A mí me pasó que dejé de tener vello en axilas y piernas y ¡no daba crédito! Fue una de las pocas cosas buenas que me pasó físicamente durante el postparto.

8) Piensas que una vez pasada la cuarentena, volverán tus ganas locas de pasión e intimidad con tu chico... Pero olvidándonos de que ahora compartes habitación con una criatura que cada 2-3 horas reclama tu atención, es que la libido no la encuentras por ningún lado... En mi caso, hasta que la lactancia no se fue reduciendo un poco con la introducción de otros alimentos y espaciándose de forma natural las tomas, no fui yo sintiendo esa necesidad de avalanzarme sobre mi pareja... 

9) Aunque el ginecólogo te dé el visto bueno para retomar tu vida sexual, es posible que no te sientas preparada mentalmente en un tiempo. Ya no me refiero a la libido, que también influye. Pero es posible que sientas miedo, inseguridad, ante tal encuentro... Es normal. Tomáte tu tiempo hasta que te sientas preparada. También es normal que las primeras veces, sientas molestias o un ligero dolor. Tómatelo con paciencia y tranquilidad. Es normal.

10) Las reglas pueden volver muy distintas... Antes de estar embarazada, mis reglas eran bastante normales, mis ciclos duraban unos 30-31 días, y mis menstruaciones me duraban 7-8 días por lo general, me causaban algún pinchazo o molestias, pero nada más. Tras el parto, disfruté de 8-9 meses sin regla (bendita la lactancia materna), pero cuando vino ya poco tenía que ver con la regla a la que yo estaba acostumbrada... Mis ciclos han cambiado y aún no les pillo yo el truco... Creo que ahora son de 28-29 días, he perdido la pista a cuándo ovulo (antes lo tenía muy claro), mis reglas duran menos, unos 6-7 días, pero ¡dueeeleeeeen que no veas! ¡Jolines, si duelen! Ya no es solo pinchazos o molestias, o hinchazón... Es un dolor en las partes bajas, como si acabara de parir. Hablé del tema con mi ginecóloga y me comentó que era normal sentir esos dolores con las reglas, hasta 1 año después de haber dado a luz, o incluso más tiempo. ¡Pues menuda gracia!

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11) Seguirás con el carácter y humor típico del embarazo mientras estés dando el pecho... Yo pensaba que tendría cambios de humor y estaría más sensible y llorona en la cuarentena, pero que después ya volvería a mi "cordura" habitual previa al embarazo. Pues no. La lactancia, con sus ventajas e inconvenientes, trae consigo un periodo más larguito de revolución hormonal que hace que te pongas a llorar por tonterías, se te salga la vena en la frente por minucias, tengas menos paciencia, o quieras divorciarte de tu marido por haberle puesto el pañal al revés a tu precioso bebé... Así que tranquila, estarás loca unos meses más, y dale un abrazo compasivo por adelantado a tu santo marido que no sólo te aguantará en los meses de embarazo, sino también durante un largo puerperio con inestabilidad mental y emocional. ¡Un aplauso por aquellos santos varones que aguantan al pie del cañón, haya embarazo, puerperio, abstinencia sexual, miradas asesinas, llantinas, o histeria! El mío tiene el cielo ganao.

12) Te acostumbrarás a dormir poco y en tramos de 2 horas o menos, y serás capaz de seguir con un ritmo de vida más agotador aún que al que estabas acostumbrado. Aun así, la falta de sueño puede que pase factura y que en medio de la noche, confundas realidad con ficción, y creas que te has dormido con el niño en brazos y empieces a buscarlo desenfrenada entre las sábanas, despertando a tu marido ante el grito "¡he perdido al niño en la cama!" y él se despierte asustado, con el corazón a punto de salirle por la boca, y cuando consiga recuperar el aliento, te mire con ojos asesinos y te diga "cari, el bebé está en la cuna desde hace 1 hora, y ¡lo vas a despertar, como has hecho conmigo!". He de decir que eso me ha pasado en más de una ocasión, y a mi marido también: nos hemos levantado en plena madrugada asustados de habernos quedado dormidos con el niño en brazos o de que se nos ha caído o perdido entre las sábanas, cuando el renacuajo dormía plácidamente en su cuna al lado nuestra...

13) La postura para dormir. Antes de estar embarazada, yo solía dormir boca abajo. Sobra decir que en cuanto supe que estaba embarazada, dejé de dormir así y empecé a dormir de lado o boca arriba. Me costaba mucho, porque toda mi vida dormí boca abajo, pero dadas las circustancias, no me quedaba más remedio que adoptar otras posturas por las noches. En el segundo trimestre, me sugirieron los médicos dormir preferiblemente sobre el lado izquierdo, para favorecer el riego sanguíneo que llega al bebé. Así que todas las noches intentaba dormir sobre mi lado izquierdo. Al final acababa entumecida y cansada de la misma postura, pero boca arriba me ahogaba y el peso de la barriga me mataba, y del lado derecho me sentía culpable y me daba miedo de estar reduciéndole el flujo de sangre al bebé, así que intentaba estar poco tiempo sobre el lado derecho. Estaba deseando dar a luz y poder volver a dormir boca abajo. Eran unas de esas cosas que más echaba de menos. Pero tras dar a luz... vino la subida de leche y los pechos los tenía que me dolía el simple roce de la ropa. Cuando las grietas de los pezones se curaron y me recuperé de mi primera mastitis, intenté dormir boca abajo, pero al tener los pechos cargados de leche, seguía resultándome molesto, así que seguí durmiendo boca arriba o de lado. Ahora que ya no tengo tanta leche, intento dormir boca abajo, y ¡no estoy cómoda! No tiene que ver ahora con el pecho, ni nada. Simplemente ya no estoy cómoda durmiendo así, y prefiero dormir de lado. Recientemente leí que es algo que le pasa a más mujeres tras el embarazo... ¿A vosotras también o soy yo el único bicho raro?

Venga, venga, contadme, ¿qué cambios tras el embarazo os han pillado a vosotras por sorpresa?

Por favor, que alguien diga algo, y no me haga sentir rara...

viernes, 24 de abril de 2015

Lactancia Materna Exclusiva: ¿Método Anticonceptivo Seguro?



Hace unos días vi en Instagram, en un perfil de una chica que recientemente ha sido mamá (@9mesesy1vida), una imagen acompañada de un título y texto que decía así (era un texto muy largo, y he incluido los párrafos principales):


Foto de @9mesesy1vida

"¿Sabías que la lactancia materna exclusiva es un método anticonceptivo? 

(...)

Las mujeres que dieron a luz recientemente pueden utilizar la lactancia continua como método anticonceptivo (yes, como lo oyen) cuando mi doctor me dijo hoy que no hacía falta cuidarme con nada mientras diera pecho únicamente le dije incrédula: pero vossss sos looooco?? 

(...)

Y entonces me explicó!! La lactancia se puede usar como anticoncepción cuando, después del parto, una mujer amamanta exclusivamente a su bebé. Eso significa que el bebé no consume  nada más aparte de la leche materna. El acto de amamantar naturalmente cambia las hormonas de una mujer y, en consecuencia, no puede quedar embarazada.

¿Cómo previene los embarazos? Mientras una mujer amamanta a su bebé, su cuerpo no produce una hormona que es necesaria para la ovulación (...). El embarazo no puede concretarse si no se libera un óvulo. La eficacia es una preocupación común e importante cuando se elige un método anticonceptivo. Al igual que todos los métodos anticonceptivos, la lactancia es mucho más eficaz cuando se utiliza correctamente. Usar esta práctica como método anticonceptivo puede ser eficaz durante los 6 meses posteriores al parto sólo si la mujer:

  • no reemplaza la leche materna con otros alimentos
  • alimenta a su hijo por lo menos cada cuatro horas durante el día y cada 6 horas durante la noche.
  • no tuvo ningún periodo menstrual desde el nacimiento de su hijo.

(...)
Usar la lactancia como método anticonceptivo es seguro y no tiene efectos secundarios."


He de reconocer que en un principio me quedé flipada, pensando qué tipo de profesional diría eso. A mí todos los ginecólogos que me han tratado durante y después del embarazo me dijeron que el método MELA (método anticonceptivo de lactancia y amenorrea) no era muy fiable, y que aunque se cumplieran con todos los requisitos y pautas, había casos en los que la mujer igualmente ovulaba y quedaba embarazada. Así que mejor usar otro método anticonceptivo, si no quería un embarazo sorpresa, y recomendándome que lo ideal para el cuerpo de la mujer es esperar entre 6 meses y 1 año aproximadamente tras el parto antes de buscar otro embarazo, para asegurar que el cuerpo está totalmente recuperado en todos los sentidos.

Antes todo el mundo pensaba que si estabas dando el pecho y no tenías la regla, no te podías quedar embarazada y podías mantener relaciones sexuales sin protección de ningún tipo. Sin  embargo, hoy en día todos los ginécologos, matronas y médicos de cabecera que me han atendido desde que tuve al peque, me informaron de que usar la lactancia materna exclusiva como método anticonceptivo no es lo más seguro y podría venir un embarazo sorpresa. ¿Por qué? Aunque técnicamente con la prolactina no se debería ovular, por más que se dé el pecho a demanda cada menos de 3 horas y de forma exclusiva, no te garantiza que tu cuerpo no esté ovulando. Cada cuerpo es diferente y puedes estar ovulando sin saberlo. Hay mujeres que, a pesar de la lactancia materna exclusiva y a demanda, a los dos meses tras dar a luz tuvieron su primera menstruación tras el embarazo (lo cual significa que al mes y medio, o antes, estaban ovulando). Hay otras mujeres que tras la cuarentena ya tuvieron la regla. Otras a los 4 meses, otras a los 8 y otras más tarde. Eso significa que obviamente aproximadamente 15 días antes de esa regla que nadie sabe cuándo va a venir, se produce la ovulación, que supuestamente la prolactina y demás hormonas que generan la lactancia lo evitarían. Y sin tú saberlo puedes estar ovulando, por mucho que estés dando lactancia exclusiva a demanda dejando transcurrir entre tomas menos de 2-3horas. Yo misma di pecho de manera exclusiva hasta los 6 meses, y mi peque tomaba pecho cada 1:30-2 horas. Cuando fui a mi ginecóloga y me revisó, e hizo una ecografía, pudo ver que estaba ovulando, y efectivamente no mucho después me vino la regla. Desde primera hora, tanto esta ginecóloga del seguro privado, como las de la Seguridad Social y las matronas que me atendieron tras el parto y en las citas durante el puerperio, me advirtieron que aunque estuviera dando pecho y no me viniera la regla, debía utilizar un método anticonceptivo, como pastillas o preservativo, porque no se podría predecir en qué momento mi cuerpo empezaría a ovular (si no estaba ovulando ya). Pero si no tienes una ecografía, es complicado averiguar si estás ya ovulando o no. Y si lo estás, te puedes quedar embarazada perfectamente.

Yo lo tenía súper claro, y se me había grabado a fuego en la mente que el MELA no era un método seguro y que se debía recurrir a otros métodos anticonceptivos (y que fueran compatibles con la lactancia), pero ha sido ver este post en Instagram y leer que otros ginecólogos afirman que sí es seguro que me ha hecho investigar algo más al respecto.

Por lo que he podido ver, el Ministerio de Sanidad de España considera el MELA como un método anticonceptivo no seguro, mientras que la OMS y UNICEF (más información aquí) lo consideran tan fiable como las pastillas o el preservativo, para así promover aún más la lactancia materna en países subdesarrollados. La página Alba Lactancia Materna, dice así sobre este método:

"La posibilidad de embarazo es cero durante las primeras doce semanas post-parto, y de entre el 1-2% durante el segundo trimestre de vida del bebé, según los estudios efectuados al respecto.
La mayoría de mujeres lactantes que cumplen los requisitos del Mela no tienen la primera regla antes de los 6 meses posparto, y algunas mantienen la amenorrea hasta pasado el segundo cumpleaños del niño.

De hecho, hasta 14 días antes de la primera regla no se ovula por primera vez y no hay posibilidad de embarazo. Pero claro, no sabemos que hemos ovulado de nuevo hasta que volvemos a tener la regla…"

Exactamente en la última frase está el quid de la cuestión. No se sabe cuándo se empezará a ovular. Y aunque estimen que es un 98% seguro este método y que es improbable (pero no imposible) un embarazo durante las 12 primeras semanas tras el parto, lo cierto es que existen mujeres que tienen la regla tras la cuarentena o a los dos meses después de dar a luz, lo cual significaría que habrían empezado a ovular 14-15 días antes de tener la regla, y pudiéndose haber quedado embarazada, aún sin haber tenido la regla.

¿Vosotras qué opináis sobre el MELA? ¿Qué os dijo vuestro médico? ¿Lo consideráis un método seguro como afirman UNICEF o la OMS, o no seguro como el Ministerio de Sanidad de España?

sábado, 18 de abril de 2015

Los Pañales de Tela: nuestra experiencia (Parte II)


Todavía cuando alguien se entera de que el peque usa pañales de tela, se quedan sorprendidos, pero también intrigados. Y es que poca información y publicidad se le da en nuestro país a estos artículos. La corriente principal y que todo el mundo conoce son los "dodotis", que compras en el súper, y tras cada cambio de pañal tiras a la basura y ya está. La gente mira las ofertas y en función del precio compran una marca u otra... Como mucho, algunos buscan más información y averiguan cuáles son los pañales más recomendados en relación calidad-precio. Poco más.

He de reconocer que cuando estaba embarazada, yo hice exactamente eso. Oí muy vagamente hablar de que existían pañales de tela, pero como ya he dicho, ni me molesté en averiguar más sobre el tema, porque daba por sentado que eso sería liar una tela con un imperdible alrededor del culito del bebé y que todo acabaría empapado. 

Luego viendo los gastos que van suponiendo los tradicionales "dodotis", aunque fueran de marca blanca y los más baratos del mercado, me paré un momento a pensar y sopesar la idea de investigar sobre los pañales de tela. Según mi lógica, si compraba de tela, aunque inicialmente me gastara más dinero, luego a la larga me supondría un ahorro importante, sobre todo si queremos tener más hijos (no os hagáis ilusiones con ese plural que he puesto... de tener más prole, sólo tendríamos 1 vástago más, ¿eh?).

Después de un par de meses leyendo y documentándome sobre el tema, tomé la decisión de cambiar de bando, y pasarme a los pañales de tela (podéis leer más sobre esa decisión aquí). Eso fue hará más de un mes. Ha pasado ya más tiempo, y creo que era oportuno actualizar el blog con nuestras impresiones y experiencia con los pañales de tela. Lo haré respondiendo a las preguntas más frecuentes que nos hacen:

¿Qué pañales usamos?


Como ya dije en el primer post, elegimos los pañales de tela Charlie Banana, de talla única o One Size. También los venden de distintas tallas, pero preferimos nosotros esta opción.


¿Cuántos pañales hemos comprado? 

 
Compramos un total de 2 paquetes de 6 pañales cada uno, calculando para tener para dos días y así que nos dé tiempo a lavar, tender y tener recambios. De los desechables, solíamos usar aproximadamente con el peque, que tiene ahora mismo 18 meses, unos 4-5 pañales desechables al día. Así que pensamos que así tendríamos suficientes de tela.

¿Fueron suficientes o al final se necesitan muchos más?

 
 Ahora después de 1 mes de haber estado usando exclusivamente pañales de tela, puedo decir que sí son suficientes, PERO vienen justitos. Es decir, no me he visto aún en el aprieto de no tener ningún pañal limpio disponible, pero hay que tener en cuenta que estamos en primavera y vivimos al sur de España, donde ya los días suelen ser calurosos y a pesar de todo, voy agobiadilla y cada día pongo una lavadora con la ropa del niño y sus pañales del día, para tener al día siguiente. Si tuviera 1 ó 2 paquetes más, iría más tranquila, sobre todo de cara al invierno o en días nublados y de lluvia, que no da tiempo a que se sequen.

¿No suponen mucho gasto de agua y detergente?


Realmente no. Los suelo ir almacenando y pongo una lavadora al final del día con la ropa del niño y todos los pañales que usó durante el día. Le pongo muy poquito detergente, porque tampoco recomiendan usar mucho, o perderán absorbencia. Antes de los pañales de tela, tenía que poner una lavadora un día sí, un día no. Ahora son todos los días, sí. Antes echaba mucho detergente y además suavizante. Ahora no. Con un poquito de detergente es suficiente y controlo más la cantidad que echo en la lavadora. Además ahora no ando llenando bolsas de basura con pañales desechables y teniendo que comprar paquetes de bolsa de basura cada semana. Veo que voy ahorrando más no solo al no tener que comprar pañales desechables, sino también bolsas de basura, detergente...



¿No te quitan mucho tiempo?


Es cierto que me quitan más tiempo que los desechables. Con los desechables sólo tenía que sacar un pañal del paquete, ponérselo, y el sucio tirarlo a la basura. Punto. Con los de tela, en los cambios de pañal los sucios los voy metiendo en la lavadora, sacando los insertos del cobertor para separarlos y que se laven mejor. Luego hay que tenderlos junto con el resto de la ropa que se haya lavado, y finalmente después yo me dedico cada noche antes de acostarme a dejar puestos los insertos en cada cobertor y guardarlos pañales ya listos en sus respetivas cajas para tenerlos listos al día siguiente. En lo que noto que me quita tiempo es en este último punto, el poner los insertos y preparar los pañales para el día siguiente. El otro día me cronometré, y en total se me fueron 10 minutos. No es mucho tiempo, sólo supone acostumbrarse un poco y adoptar una nueva rutina para sacar esos 10 minutos. Hay quien prefiere dejar por un lado los cobertores y por otro lado los insertos y guardarlos separados, y con cada cambio de pañal, cogen cobertor e insertos y lo preparan sobre la marcha. Yo prefiero tenerlo todo preparado con antelación y no tener que estar introduciendo los insertos en el cobertor agobiada, mientras veo que mi churumbel corretea con el pañal repleto de caca, tirándose de culo por todos lados, y yo temiendo porque el pañal no contenga la caca y acabe todo perdido.

¿No cala o tiene fugas?


No, no cala. Fugas tiene si no se lo ajustas bien. Igual que un desechable. Tendrás que ir jugando con los broches y el elástico que tiene hasta dar con la medida que haga que le quede cerradito y ajustado, para que no tenga fugas. Cada cierto tiempo, lo mismo tendrás que volver a encontrar la nueva medida, porque los niños crecen o adelgazan o engordan, pero tras el primer mes, ya sabes en qué medida abrochárselo para que no tenga fugas. 

¿Se puede lavar con cualquier jabón o detergente?


¡No! Cuidado con esto. Muchos somos los que compramos los pañales de tela y, aunque leemos las recomendaciones del fabricante de usar un detergente sin perfume o enzimas, pensamos que el jabón casero de la abuela o el jabón tipo Lagarto, e incluso el Marsella o similares, son aptos para lavar pañales de tela. Pues no. Esos jabones o cualquier jabón por lo general están elaborados con una base oleosa, que acaban impermeabilizando el tejido interior del cobertor y los insertos, con lo cual perderá absorbencia y podrá haber fugas. Se debe usar un detergente, repito, detergente, no jabón, que no tenga perfume, ni enzimas, ni suavizantes, sin parabenes, ni colorantes, hipoalergénico... Normalmente venden detergentes especiales para pañales de tela por internet, pero no es necesario comprar uno específico. También es apto para lavarlos y al alcance de cualquiera el detergente de pieles sensibles de Mercadona. También se puede lavar con nueces de lavado, de venta en herboristerías.

¿Qué pasa si ya lo he lavado con un detergente o jabón no apto?


Que no cunda el pánico. A nosotros nos pasó. Lo lavamos al principio con el jabón Lagarto, hasta que nos documentamos más y se nos descompuso el cuerpo cuando nos enteramos de que nos podíamos haber cargado nuestros preciados pañales de tela recién comprados. Sólo habrá que darle unos cuantos lavados con agua, aclararlos, y poco a poco y con los sucesivos lavados y unos aclarados extra más, irán recuperando su absorbencia. 

¿Resultan cómodos?


Mi peque no se ha quejado. De hecho, se porta mejor en los cambios de pañal desde que usamos los pañales de tela. En cuanto a irritaciones o alergias, no le han dado. Sólo le ha dado algo de irritación, cuando está saliéndole algún diente y ha hecho una caca algo más ácida. Eso igualmente le pasaba con todos los desechables. Pero sí veo que le sana la piel antes con los de tela. 

¿No abultan mucho?


Me imagino que dependerá de la marca de pañales de tela que escojas. Los Charlie Banana sí es cierto que abulta más que los desechables, pero tampoco es algo muy exagerado, y toda la ropa le sigue yendo perfectamente, bodies incluidos.

¿Le has encontrado alguna desventaja?


Los insertos tardan muuuucho en secarse. Normalmente necesitan estar un día entero (desde las 9 de la mañana hasta las 7-8 de la tarde) tendidos al sol. Si hace mal día, no se terminan de secar, y he tenido que recurrir al toallero eléctrico, para que diera tiempo a que estuvieran secos para el día siguiente (por suerte el toallero eléctrico gasta poca luz). De ahí que creo que sería mejor tener 18 pañales, en lugar de 12. 



¿Y si no se secan al aire libre?


Puedes ponerlos en la secadora, a temperatura baja, sin problemas. Pero el fabricante aconseja no abusar constantemente de la secadora porque reduce la vida útil de un pañal, pudiendo la temperatura alta constante pasar los elásticos. Sí recomiendan más para estos casos usar un toallero o tendedero eléctrico o ponerlo cerca de una estufa (nunca ponerlos directamente sobre la estufa, sino manteniendo una distancia prudencial para que no se quemen; y en el toallero electrico yo pongo una toalla entre las barras y los insertos y cobertores, para evitar que estén en contacto directo con la fuente de calor).

¿Y qué haces para limpiar la caca?


Es cierto que mi peque tiene 18 meses y no hace las mismas cacas que cuando era más pequeño. Ahora las hace más sólidas, como los adultos, y es más fácil su retirada del pañal. Con un poco de papel higiénico la tiro por el WC. Hay días que dependiendo de la dieta, las hace más blandas (y nos deja un buen pastel), y aún así resulta muy fácil con un poquito de papel higiénico tirarla al WC. Después de cada cambio de pañal, normalmente voy dejando los pañales metidos en la lavadora separados de sus insertos, para que al final del día sólo tenga que poner la lavadora. En los casos de caca, antes de meterlos en la lavadora, tiro lo sólido al WC y le doy una enjuagada con agua para retirar posibles manchas. Después de enjuagarlo en agua, lo meto en la lavadora.

¿No se quedan manchados?


No, son antimanchas y doy fe de ello. En los casos más difíciles que hemos tenido, lo he frotado a mano un poco con agua, y la mancha salía fácilmente. Lo que cuesta más quitar la mancha es a los insertos. No obstante, una vez lavados y tendiéndolos al sol, se vuelven a quedar blancos como al principio. Éste era un punto en el que incluso cuando los compré seguía sin creérmelo, pero tras haberlo probado y visto con mis propios ojos, puedo asegurar que es cierto.

¿No se le queda el culito húmedo al usar un pañal de tela?


Esa pregunta me la hice yo también. Y sorprendentemente, no. El pañal que usamos nosotros, Charlie Banana, tiene una tela micropolar que separa los insertos (que es lo que realmente absorbe el pipí) de la piel del bebé, para asegurar que la humedad de los insertos no se traspase al culito del peque. De hecho, al cambiar el pañal de toda una noche, si tocas el cobertor del lado que está en contacto con la piel del bebé lo notarás seco. Sí, es una guarrada, pero yo lo hice para quedarme tranquila, y poder dar fe de ello.

¿Se le puede poner cremitas o talco usando esos pañales?


No. De hacerlo podrías perder la absorbencia del tejido, al quedarse la crema o talco obstruyendo los poros del cobertor o insertos. Si necesitas ponerle crema, puedes usar un inserto desechable (para evitar que la crema entre en contacto con el tejido) o bien usar de manera excepcional un pañal desechable.

¿Merece realmente la pena?


Sí. Por un lado, sabes que estás ayudando al medio ambiente al reducir la contaminación (los pañales desechables son uno de los productos que usamos los humanos que más tardan en descomponerse, 450 años). Por otro lado, y es lo que más atrae a la mayoría, es el ahorro económico. Nosotros hicimos el cálculo y al año gastamos unos 400€ o más en pañales desechables de marca blanca, de menor precio en el mercado (en realidad son más de 400€; ahora mismo he hecho el cálculo de los pañales del Lidl de 8€ teniendo en cuenta el ritmo de cambios de pañal de un peque de 18 meses; en un recién nacido o bebé de hasta 10 meses, los cambios de pañal son más frecuentes y, por lo tanto, el gasto es el doble). En total por niño, comprando pañales desechables durante alrededor de 2 años, gastaríamos 800€, tirando muuuy por lo bajo. En total, con los pañales de tela, 3 paquete de 6 pañales cada uno, a 117€, en total nos gastaríamos 351€ al principio, pero luego no tendríamos que volver a comprar más, salvo que fuera por gusto (y sarna con gusto no pica), pudiéndose utilizar para los sucesivos hermanos, y posteriormente revender de seguna mano, pudiendo recuperar algo de ese dinero de la inversión inicial que se hizo. Además son más respetuosos con la piel del bebé, ya que es tela, y no plástico, reduciendo la posibilidad de irritación y alergias.

¿Cuánto dura cada pañal o con qué frecuencia le tienes que cambiar?


Pues cada paquete viene con 6 cobertores y 12 insertos (6 tamaño pequeño y 6 tamaño mediano/grande). En función de los insertos que utilices durará más o menos. A partir de los 3 meses recomiendan poner 2 insertos en el cobertor. Mi peque tiene 18 meses y siempre le ponemos dos insertos, uno grande y uno pequeño, y va perfectamente. Al principio, pensamos en ponerle 2 insertos grandes para la noche, pero luego nos hemos dado cuenta de que realmente no hace falta, y le seguimos poniendo uno pequeño y otro grande también para la noche. Durante la noche no ha tenido nunca fugas, y duerme entre 10-12 horas del tirón. Durante el día, seguimos cambiándolo al mismo ritmo que los desechables: al despertarse por la mañana, antes de la siesta (justo antes del almuerzo), después de la siesta (después de la merienda), y antes de acostarlo por la noche. Si ha hecho caca, obviamente lo cambiamos antes de esos horarios.

¿Hay distintos tipos de insertos?


Sí. Los hay de diferentes materiales: algodón, cáñamo, bambú, microfibra... En función del material, la absorbencia será mayor o menor, y durará más horas.

¿Dónde se pueden comprar este tipo de pañales?


Por desgracia, no los venden junto a los desechables en los supermercados o grandes superficies, lo que hace que sigan siendo unos grandes desconocidos ante el público en general. Se pueden comprar por internet en tiendas especializadas online, en las web de los propios fabricantes, o bien en algunas tiendas físicas específicas de puericultura. Cuando yo me decidí a comprarlos, tuve la mala suerte de que en las tiendas online que consulté tenían agotados los packs que yo quería, por lo que opté por comprarlos directamente al fabricante. Charlie Banana tiene su sede en Hong Kong, realicé mi pedido, y justo coincidió con las festividades del Año Nuevo Chino, cosa que no tuve en cuenta. Tras demorarse el envío más de una semana, por fin me confirmaron que me lo habían enviado. Hasta que recibí una carta de Correos informándome de que mi paquete lo tenían retenido en Aduanas, en Barajas, y que tendría que pasar una inspección. Eso fue en febrero, y a día de hoy sigue retenido en Aduanas, pendiente de una nueva inspección por el Departamento de Farma, sin fecha a la vista aún. De vergüenza, e indignante. Después de tanto esperar (y aún sigo esperando), volví a mirar en las tiendas online a ver si tenían de nuevo el producto, y para mi sorpresa di con la tienda SEKOIA (de haber sabido de esta tienda desde el principio -no la había descubierto cuando empecé a buscar dónde comprar los pañales- no habría recurrido al fabricante y no estaría todavía esperando algunos pañales de tela que no sé si en algún momento me los entregarán o no), donde los vendían a mejor precio que en el resto de tiendas online españolas que había encontrado, y tras realizar mi pedido en dos días los tuve en la puerta de mi casa. ¡Más contenta no podía estar con SEKOIA! Para vuestra información SEKOIA tiene también tienda física en la provincia de Málaga, creo que por Benalmádena, y organizan talleres y showrooms muy interesantes sobre porteo, pañales de tela, etc. Por desgracia a nosotros nos pilla lejos y la compra la tuvimos que hacer online, y por donde vivimos nosotros no hemos encontrado ninguna tienda física que los venda.

Fuente



¿Te arrepientes de algo?


Sí, me arrepiento de no habernos pasado a los pañales de tela mucho antes. Podríamos haber ahorrado muchísimo dinero desde el principio, y viviendo con un solo sueldo eso lo habríamos agradecido y habríamos podido ahorrar como 400-500€, que se dice pronto. Pero bueno, más vale tenerlos ahora y poder usarlos con el bichillo y en el futuro con el hermanito (o hermanita).








Pues ahí tenéis toda nuestra experiencia con los pañales de tela, y lo que hemos aprendido durante este mes de cambio y adaptación. ¡Espero que os sea de ayuda toda esta información!



viernes, 17 de abril de 2015

Premio Parabatais


Bueno, bueno, el mes de abril ha ido de premios, parece ser... Y es que hace unos días Mamá Oso Panda, y aprovecho para mandarle desde aquí un besote enooooorrrrrme, le concedió otro premio a este humilde blog: ¡el tercer premio que recibimos en lo que llevamos de mes! Esta vez se trata del Premio Parabatais.


Según explica en su blog Raquel, citando a María de Jugando con Duendes y Hadas: "Parabatais es algo así como compañeros/guerreros con un vínculo muy fuerte para toda la vida. Y por eso que te lo entreguen otros compañeros tiene un significado especial, ya que el premio consiste en reconocer el compañerismo y la hermandad entre blogueros".

Hace nada que nació Aprendiendo a Ser Mamá, y ver que ya voy formando parte de una comunidad, conociendo a otras mamis más profundamente, dándome cuenta de que todas formamos parte de este club exclusivo que es la maternidad, y que todas estamos en esto, viviendo lo bueno y lo malo, hace que este premio sea aún más especial, porque es precisamente un reflejo de lo que está significando abrirme a este mundo 2.0, y conocer a madres y mujeres maravillosas. Mil gracias Mamá Oso Panda por todo, el reconocimiento, concedernos este premio y sobre todo por la compañía que hacen tus comentarios en Instagram y tus respuestas, por sacarme sonrisas y carcajadas cuando veo que has dejado un comentario o has respondido uno mío. Muchísimas gracias. Si pudiera, te devolvería el premio.

Para recibirlo hay que hacer lo siguiente:

1º. Agradecer el premio a la persona que te lo ha concedido.
2º. Poner la imagen del premio en tu blog.
3º. Nominar a 15 blogs.
4º Informar a los premiados.

Bueno, aquí van mis 15 blogs elegidos:

 ¡Ojalá os haga tanta ilusión este premio como me hizo a mí!
 

martes, 14 de abril de 2015

Peque a los 18 meses





Lo dicen todas las madres, pero ¡es que es verdad! El tiempo pasa demasiado deprisa y me cuesta creer que mi pequeñín tenga ya 18 meses... ¡Un año y medio! ¿No fue ayer cuando soplaba las velas de su primer cumpleaños y hace un par de días era un recién nacido? El tiempo no corre, ¡vuela!

Siempre he ido anotando los progresos del peque mes a mes, y ahora que tengo el blog, me gustaría que me sirviera a modo de diario en ese aspecto para no olvidarme de cómo es ahora mismo. Porque puede ser un solete, pero tiene momentos de pequeño monstruito, y unas ocurriencias que no quiero dejar en el olvido. Quiero recordar todo lo que sea posible, todos los detalles que este blog me permita.

Ahí va una lista de cómo es mi peque a sus 18 meses (los cumplió hace ya un par de semanillas, pero qué más da...):

  • Le salieron sus primeras 4 muelas en el mes de febrero, una por semana. Pensaba que en marzo tendría un descanso el pobre, pero una muela le siguió dando guerra, y luego empezaron a inflamarse las encías en la zona de los colmillos. Desde que ha cumplido 18 meses, y desde este fin de semana pasado hasta ayer mismo, ya han roto la encía 2 colmillos. ¡Yujuuu!

  • Las muelas le dolieron y le hacían un estropicio en la boca al pobre mío, saliéndole sangre y con trozos de encía rotos colgando... muy "gore". Pero parece ser que los colmillos es lo que peor lleva de momento en cuanto a dolor. Está muy molesto y eso se traduce en que quiere muchos brazos, mimitos, no consiente estar solo, duerme mal por las noches y las siestas, apenas quiere comer, lo muerde todo y sólo le apetece agua.

  • Acostumbrados a que durmiera 11-13 horas del tirón todas las noches, despertándose normalmente sobre las 9 de la mañana, y acostándolo sobre las 9-9:30, y durmiéndose a los 5 minutos, ahora el pobre mío le cuesta dormirse entre media hora y una hora, por lo que se hacen las 10:30-11:00 de la noche y él despierto, y se despierta antes que los pájaros, a las 7:30, o a veces a las 6:30 (y eso no lo llevo nada bien... y sé que soy una afortunada, pero a lo bueno una se acostumbra pronto).

  • Sus siestas estaban siendo idílicas, dormía entre 2-3 horas, a veces tenía que ir a despertarlo, porque estaba en modo dormiloncete. Pero desde hace un par de semanas, el pobre mal duerme durante 1 hora y se levanta de mal humor, llorando, y con sueño.

  • En Semana Santa tuvo un comportamiento que consistía en rabietas y mucho genio casi cada 5 minutos. Se hizo muy cuesta arriba. Todo le parecía mal. No sabía él ni lo que quería... Nos hizo falta muuucha paciencia, humor, empatía y dosis extras de abrazos y mimitos. A la semana cambió radicalmente y está mucho más obediente, tranquilo y de mejor humor... Aunque tiene sus días. 

  • Comía durante la Semana Santa que daba envidia, se lo zampaba todo. Ahora come con muchas ganas los primeros bocados, y luego ya no quiere nada. Veremos a ver cuánto pesa este bichillo en la consulta de niño sano, pero me da a mí que va a ser peso pluma.

  • Antes tenía comidas favoritas y comidas que no podía ni ver. Ahora come prácticamente de todo, aunque sea algo nuevo y el primer bocado le cueste. Sí sigue teniendo algunos platos favoritos: el huevo frito con patatas, la pizza o la pasta siguen siendo los que devora con más ansia. Las albóndigas de la abuela y el cocido también le encantan. Aún le cuesta un poco más masticar carnes y algún pescado, pero ha avanzado mucho en este aspecto y ya come de todo sin arcadas o sin que se le haga bola. Cuando está comiendo algún alimento que le cuesta o cansa más al masticar, le hago siempre un poco de verdurita blandita que le voy dando entre medias para ayudarlo a tragar todo.

  • Siguen sin gustarle las frutas ácidas como la naranja, mandarina, piña, e incluso las fresas. La primera vez que comió fresas se las devoró en un santiamén. Ahora las escupe con cara de asco. 

  • Le ha dado por el "NO". Se pasa el día con rachas en las que sin venir a cuento y simplemente porque sí él empieza "no! no, no, no... noooo, noooo", y desde este fin de semana lo acompaña también moviendo el dedo índice, muy serio. Sobre todo lo hace cuando juega con su teléfono de juguete... Ahora me hace gracia. Cuando me lo empiece a decir en serio a mí para todo, ya no me resultará tan simpático.

  • Me encanta que vaya teniendo más memoria y asocie eventos o series de eventos... Por ejemplo, sabe que si me ve con las llaves o sus zapatos en la mano es porque vamos a salir. Ahora sabe que si vamos a salir, hay que ponerse los zapatos primero. Por lo tanto, va corriendo y se sienta en el primer escalón de la escalera de la entrada, y levanta un pie, para que le pongamos un zapato, y luego intenta él ponerse el otro zapato. Me encanta eso, porque antes era una lucha intentar cazarlo, sujetarlo y ponerle el calzado... Ahora parece más mayor y me encanta que sepa anticiparse a los hechos e intente hacer cosas por sí mismo.

  • El baño es uno de sus momentos favoritos. No hay quien lo saque de ahí. Su parte favorita, salpicar a lo bestia y ver hasta dónde llega el agua... ¡Y lo deja todo inundado! También le encanta abrir y cerrar el grifo.

  • Está últimamente más cariñoso y nos da muchos besos, tanto si se lo pedimos como si no. También viene corriendo a darnos abrazos. Eso me derrite.

  • Le encanta que juguemos en modo cafre a hacerle cosquillas y lanzarlo por los aires al sofa. También le gusta jugar al "yeehaw!!" o vaqueros, él montado a caballito sobre su pobre madre que va al trote por el salón hasta que lo lanza al sofa. Como me pille de rodillas poniendo una lavadora o recogiendo, viene por detrás, me agarra de los hombros y empieza a decir "yeee...haaawww?" para que lo coja y juguemos un rato.

  • No habla mucho. Casi nada, vamos. Bueno, no, corrijo. Habla mucho, EN SU IDIOMA. Lo que es en cristiano ya es otra cosa. Le hablamos en dos idiomas, y quizás eso le esté influyendo. Dice "yaya", "car", "bruummm" (para coche, autobús o cualquier cosa que tenga ruedas), "yay", "no", "yeehaw", "dog", "guau guau", "this/that", "there", "daddy", "dad", "papá", "mamá", "momma", e imita el ruido del elefante o del caballo. Poco más. También se comunica mucho con gestos y las manos, tiene ya expresiones acuñadas para preguntar "¿qué pasó?" (levantando un poco las manos y poniendo las palmas hacia arriba y con cara de interrogante) y para "oh my God" (igual que el emoticono de Whatsapp azulado con las manos en las mejillas), también dice "hola/adiós" moviendo la mano, imita que habla por teléfono poniéndose la mano en la oreja (a falta de juguete), aplaude, choca esos cinco, y hace como que cuenta sus dedos... en su idioma inventado.

  • Le ha dado por agarrarnos de las orejas y tirar (hacia él) para forzarnos a que le demos un beso, o nos obliga a que nos demos un beso el padre y yo (tirándonos de las orejas acercándonos las caras). Es un poco autoritario y mandón este peque.
  • Le gusta compartir y darnos de comer. Me encanta ese rasgo, porque ha salido de él. No le hemos forzado ni enseñado que se debe compartir. Quizás en unos meses pasará al "todo es mío", pero por ahora quiero disfrutar del momento.

  • Sabe abrir grifos de todo tipo, "dibujar", echa vapor por la boca en toda ventana que vea para pintar con los dedos (a veces también me tira de la oreja para obligarme a participar y que yo también pinte en la ventana), le encanta saltar, dar vueltas y correr, le da inseguridad caminar sobre hierba, le gusta andar descalzo, me empieza a ayudar cuando lo visto o desvisto, se "peina" solo, le encanta saltar en la cuna y tirarnos sus peluches...
  • Le encantan los libros, pero no le gusta que se los leamos. No tiene paciencia. Hasta ahora lo que a él le gusta es coger el libro y pasar las páginas él solo (no intentes ayudarlo que se enfada), ver y señalar las imágenes, darle vueltas e investigarlo. Algunos libros que son tipo ficha con la imagen de algún animal u objeto y la palabra, sí nos pide que imitemos el ruido del animal y a veces él señala la imagen y hace el sonido.

  • Está obsesionado con el teléfono de casa. Tenemos el teclado bloqueado porque se lía a dar a los botones y ya ha llamado a casa de los abuelos más de una vez. Últimamente lo que hace es sacar el teléfono inalámbrico de la base de carga, le da al botón de la base para localizar el teléfono haciéndolo sonar, y entonces lo coge y hace como que responde una llamada. Luego lo cuelga en la base. Y vuelta a empezar. Así una y otra vez. Con razón siempre tengo el teléfono sin batería.

  • Adora la música y bailar. Bailar baila de varias formas: dando vueltas hasta que se marea y cae al suelo, dando vueltas con los brazos al aire, o saltando, o moviendo el culete, o moviendo solo la cabeza... Es muy versátil su estilo, como veréis.

  • Cuando quiere algo, ir a algún sitio o necesita nuestra ayuda para algo (o simplemente quiere hacernos partícipes en alguna actividad) nos viene a buscar, nos coge de la mano y nos lleva a donde quiere. A veces si lo que quiere es ir a la calle, viene con los zapatos en una mano y las llaves en otra. ¡No sabe !

  • Lleva un par de mesecillos que ante los extraños está más tímido. Siempre era muy sociable, y no le importaba ir y romper el hielo diciendo "hola" y haciendo monerías. Ahora por el contrario, intenta esconderse detrás de mi pierna, me abraza muy fuerte, o si es una situación que lo llega a estresar mucho porque se siente que no tiene el control (como cuando viene algún extraño a casa y él está sentado en su trona comiendo y no puede ir corriendo a esconderse) se pone a llorar con un llanto de ansiedad y miedo que me da mucha penita. También le ha dado cuando ve a algún extraño, pero con el que no se siente muy cortado, por arrojar el chupete. Dice "oh!", se quita el chupe y lo tira. ¿A qué se debe o qué significa? Ni idea. Directamente ya cuando veo que se aproxima una persona que él no conoce, le saco el chupe si por casualidad lo lleva, y me ahorro tener que ir a buscarlo 20 metros más allá en el suelo.

  • Lleva ya unas semanas que cada vez que está haciendo caca o ha hecho caca (o como él lo llamaba hace un tiempo, "puff puff" -y se tocaba la nariz), si le pregunto si está haciendo caca o que qué le pasa, me agarra primero del brazo, me tira hacia abajo, me agarra la cabeza y me obliga a olerle el pañal... ¡Y menudo aroma! En la intimidad del hogar, me causa gracia e incluso empiezo a pensar que quizás sea un signo de que poco a poco va siendo consciente de lo que hace, y puede que no dentro de mucho pueda estar preparado para que probemos la "operación quitar el pañal"... Pero cuando me lo hace en público, la vergüenza es tremenda.  La mía, claro, porque a él le da igual.

  • Otra cosita que aprendió es a "sonarse" la nariz. Después de comer, le doy una servilleta, y siempre por el mismo orden, se limpia las manos, después la boca, y por último empieza a sonarse la nariz. Sopla por la nariz y se pasa el pañuelo al mismo tiempo. No sé de dónde ha aprendido eso... Nosotros no hemos estado resfriados últimamente y no se lo hemos enseñado... ¡Pero nos hace muchísima gracia! Después de limpiarse enterito, pasa a ofrecer su servilleta y querer limpiarnos a nosotros la nariz. Si queremos evitar contagiarnos los virus, ¡vamos apañaos!

  • ¡Ah, se me olvidaba! También ha empezado a tomarse el biberón él solo, aunque sigue prefiriendo tomárselo en brazos de la mamma y que se lo dé yo (o directamente que le dé el pecho), pero para cuando estamos en la calle y él va en su carrito, se agradece que haya salido de él este cambio y voluntad de ser más autosuficiente y que se lo vaya tomando él solito. Me quedé sorprendida cuando lo hizo por primera vez en el Mercadona... me arrancó el biberón y ¡zas! ¡a la boca! Como diciendo "¡quita mamá, que tú no sabes!"

lunes, 13 de abril de 2015

Premio Dardos





¡Madre mía! ¡Parece que estamos de suerte! Hace unos días le concedieron otro premio a este pequeño blog, su segundo premio (en una semana y a tan sólo 1 mes y medio de su apertura). ¡No me lo creo!

A la que le tengo que agradecer este honor es a  Mi Mundo con Ellos Tres, que nos ha elegido entre los ganadores de este premio. De corazón, muchísimas gracias. ¡No sabes cuánta ilusión hace recibir estos premios virtuales! Dan un chute de energía y aún más ganas por seguir con este pequeño proyecto personal e intentar hacerlo algo mejor cada día.

¿En qué consiste este premio?

"es un premio que reconoce la dedicación, la creatividad y el esfuerzo de mantener un Blog y lo más importante es que es otorgado por otros blogueros, por lo que aún tiene más valor porque nadie mejor que ellos para saber el esfuerzo que un blog representa".

Reglas:
  • Poner la imagen del premio en el blog.
  • Mencionar y enlazar al blog que nos ha otorgado el premio, agradeciéndole por el mismo.
  • Otorgar el premio a 11 bloggers, avisándoles personalmente de que han sido nominados.
  • Visitar los blogs de los demás nominados, ya que lo que se pretende es dar a conocer otros blogs para que estos crezcan.
  • Responder a las 11 preguntas que te haga la persona que te nominó.
  • Realizar 11 preguntas a los blogs nominados o pedirles que te cuenten 11 cosas sobre ellos.

He aquí los nominados:
 

 Aquí respondo a las preguntas que hace Mi Mundo Con Ellos Tres, que también serán las que tendrán que responder mis nominados:


  1. ¿Cuando empezaste con tu blog? el 26 de febrero de 2015, ¡aún no hace ni 2 meses que empecé este blog!
  2.  ¿Por qué decidiste hacerte blogger? Sentía la necesidad de llegar a chicas que vayan a pasar o estén pasando por vivenciassimilares a la mía, en relación a la maternidad, y compartir mis opiniones, experiencias y poder ser de ayuda, si es posible.
  3.  ¿Que nos enseñas en tu blog? mis experiencias, mis inquietudes, mis opiniones en esto de ser madre de un pequeño terremoto.
  4. ¿Cada cuanto publicas un post? pues de momento no me impongo un número de posts a la semana... a veces son 2 otras veces 1... Me gustaría poder escribir más a menudo, pero el peque no me deja mucho tiempo para sentarme y escribir en el blog. También intento buscar ahora mismo un trabajo que pueda compaginar desde casa con el peque, y me quita mucho tiempo para dedicar al blog.
  5. ¿En que redes sociales te podemos encontrar? Facebook e Instagram.
  6. ¿Por qué elegiste ese nombre para tu blog? Porque en esas estamos: intentando aprender a ser madre. No creo que en cuanto nazca el bebé ya sepas cómo hacer tu trabajo como madre, porque en realidad vas aprendiendo poco a poco, cada día aprendes algo nuevo... en eso consiste ser madre, en aprender cada día a ser mejor en algo, en aprender de tus errores, en ensayo-error... Nunca dejas de aprender.
  7. ¿Cuál es tu lugar favorito del mundo? mi lugar favorito siempre será nuestro hogar. No importa dónde esté, no importa si nos tenemos que mudar. Donde esté mi marido y mi peque, ahí estará nuestro hogar.
  8. ¿Cuál es tu ultima canción favorita? no tengo canción favorita, pero desde que el peque está obsesionado con la película Enredados me sé las canciones de memoria y me encantan.
  9. ¿Cuáles son tus blogs favoritos? pufff tengo tantísimos... los nominados, por supuesto, también Mi Mundo Con Ellos Tres, y otros más como Mamirrachadas, Blog de Una Embarazada...
  10. ¿Cual es tu red social favorita? creo que me decantaría más por Instagram.
  11. ¿Videoblog o blog tradicional? Yo que soy más cortada y timidilla, prefiero el blog tradicional; pero el vlog también tiene su qué y puede resultar más informativo y transparente...

jueves, 9 de abril de 2015

El primer premio que recibe este blog! - Premio Liebster Award



Hace algo más de un mes que empecé mis andaduras por el mundo de las redes sociales y los bloggers con este blog como proyecto personal, y me cuesta creer que aunque aún es un espacio pequeñito aún desconocido por la mayoría de bloggers, mamis e internautas, ¡acaba de recibir su primer premio! Mil gracias Un Ángel Llamado Mamá por tu voto de confianza y entregar este modesto premio a Aprendiendo a Ser Mamá.





Qué es el Liebster Award?

Es Premio entre Blogs Pequeños de un Bloguero a otros

Las reglas de este premio son: 
1. Presentar al blog que te ha nominado y seguirlo (¡Hecho!) 
2. Contestar 11 preguntas que te haga el blog que te nomine 
3. Nominar 11 blogs con menos de 200 seguidores y notificárselo por su blog o por cualquier red social
4. Hacerles 11 preguntas a los blogs nominados 
 

A continuación respondo a las preguntas de Un Ángel Llamado Mamá:

¿ PORQUÉ DECIDISTE ESCRIBIR UN BLOG?
 
Porque quería compartir mi experiencia, mis errores y mis aprendizajes y trucos en esto de la maternidad, con otras mamis, con la esperanza de que le sea de ayuda a alguien. 

¿ FUE UNA DECISIÓN CONSENSUADA?
 
Lo estuve meditando un tiempo tras varias conversaciones con algunas amigas mamás, no mamis o futuras mamis, que me decían que siempre que hablaban conmigo aprendían algo nuevo sobre la maternidad... se lo comenté a mi marido, y él fue quien me animó a que escribiera un blog. Así nació Aprendiendo a Ser Mamá.
 
¿ TU CIRCULO CERCANO CONOCE LA EXISTENCIA DE TU BLOG  - FAMILIA , AMIGOS  Y COMPAÑEROS DE TRABAJO?
 
Algunos amigos muy ceranos sí. Compañeros de trabajo míos o de mi marido también. Pero son pocas personas de mi entorno que saben de este blog. 
 
¿ QUE EXPECTATIVAS TIENES RESPECTO A LA APERTURA DE TU BLOG?
 
Espero que pueda ser útil y ayude a aquel que lo lea. Me basta con que sea una futura mamá perdida en el tema de la lactancia o una mami desesperada porque su hijo ha dejado de dormir la noche del tirón a los 4 meses... Sólo quiero compartir mi experiencia, mis aventuras y desaventuras en esto de ser mami, y dejar mi opinión sobre los productos con los que nos hemos ido topando desde que tenemos al peque, que nos han salvado la vida o, por el contrario, han resultado un chasco... Y encontrar si es posible una comunidad de mamis y amigas que me ayuden a sentirme que no estoy sola o no soy la única a la que le pasan estas cosas.

¿ A QUE TE DEDICAS?
 
Ahora mismo me dedico al cuidado de mi hijo, de 18 meses, aunque me gustaría retomar mi trabajo cuando lo vea factible. Soy licenciada en Traducción de inglés y titulada en el Máster Universitario en Enseñanza Secundaria Obligatoria y Bachillerato de Lenguas Extranjeras, he trabajado como traductora autónoma, redactora, como profesora, y desde el año 2012 abrí mi negocio como fotógrafa profesional. Seguí trabajando estando embarazada, incluso estando de baja o recién parida, hasta que terminé proyectos que tenía pendientes y sin terminar. Cuando supe que estaba embarazada, tuve claro que los primeros años de vida de mi retoño me quedaría en casa cuidando de él y pudiendo verlo crecer. Fue un gran sacrificio económico y personal, pero pensamos que era lo mejor para nuestra familia. Ya habrá tiempo de volver reinventarse y encontrar un trabajo.

¿ SEGUÍAS OTROS BLOGS ANTES DE ABRIR EL TUYO?
 
Sí, ya estaba enganchada al canal de Youtube de Verdeliss, o a Blog de Una Embarazada y No Soy Una Drama Mamá. Son geniales.

¿CUANTO TIEMPO LE DEDICAS AL BLOG?
 
Pues escribo los posts cuando el peque está durmiendo, a veces en la siesta o si no, por la noche (que es lo más común). Suelo dedicar 3-4 noches a la semana en los posts, se me van varias horas por cada post, entre que lo redacto, reviso, corrijo, busco imágenes para acompañarlo, las edito, lo publico y comunico por las redes sociales. A lo tonto, me acuesto tardísimo todos los días y por las mañanas me cuesta la misma vida levantarme, jeje.

¿ COMO DIFUNDES TUS POST?
 
Por Instagram y Facebook. Le tengo manía a Twitter, y me niego a crearme una cuenta, lo siento.
 
¿ COMO TE DAS A CONOCER?
 
Pues por Instagram o por Facebook, y por supuesto, comentando y participando en otros blogs que sigo.
 
¿ PONES FOTOS DE TU/S HIJOS?
 
Las fotos que utilizo en mis posts o en Instagram son propias, hechas por mí, normalmente de mi hijo o de algún producto que usamos. Pero tengo claro que quiero proteger la privacidad de mi retoño y por eso no publico fotos de su rostro, fotos de desnudos, ni fotos que puedan dar información de su vida privada.
 
DEJA QUE TE CONOZCAMOS UN POCO: UN COLOR, UNA PELI Y UNA COMIDA
 
Color... turquesa. Una peli... Mmm, me gustan muchas. La última que vi fue Interstellar, y me gustó bastante, aunque es larga. Algunas de mis favoritas son 50 Primeras Citas, Niños Grandes, Shrek... Pero últimamente soy más de series. Esto de ser madre me deja con poca energía para mantenerme despierta durante toda una peli... Cosas de ser madre. Una comida: ravioli rellenos de berenjena, con salsa de tomate con aceitunas y bechamel. 

Aquí van mis preguntas:
 
1. ¿Cómo se te ocurrió ese nombre para tu blog?
2. ¿Por qué decidiste abrir un blog?
3. ¿Cuáles son los principales temas que abordas?
4. ¿En qué momento del día escribes los posts?
5. ¿Qué opina tu pareja de tu blog?
6. ¿Cómo has dado a conocer tu blog?
7. ¿De dónde sacas la inspiración para tus posts?
8. ¿De qué tema te gustaría dedicar un post en tu blog pero no te atreves?
9. ¿A qué te dedicas?
10. ¿Qué es para ti lo mejor y lo peor de la maternidad?
11. ¿Cuál es el artilugio más inútil de puericultura que haya caído en tus manos? ¿Y el más útil?

Y los nominados son...